RAYOS X

Radiografía

La radiografía (RX) resulta muy útil para visualizar el esqueleto, el abdomen, los pulmones, etc. Las imágenes se obtienen a partir de rayos X que atraviesan el cuerpo y se ven plasmados en una pantalla. En función de la naturaleza de los tejidos atravesados, los rayos X se atenuarán más o menos, dando un grado de transparencia distinto a la película.

«Las dosis empleadas en radiología estándar son muy bajas. Para una radiología del tórax, por ejemplo, la dosis de radiación es de 0,03 mSv, es decir, el equivalente a la radiación experimentada en un vuelo de Ginebra a París. En Suiza, la dosis anual que se recibe de forma natural es de 2,4 mSv».

Desarrollo de la intervención

Preparación

No se necesita ningún tipo de preparación. El personal del centro radiográfico que lleva a cabo la evaluación le indica al paciente qué ropa y joyas se debe quitar.

El examen

A continuación, el técnico le indica la posición que ha de adoptar. Dicha posición puede resultar incómoda, pero nunca dolorosa. A menudo, para ver el órgano examinado desde distintos ángulos (de frente, de perfil, etc.) se necesitan varias imágenes. Es imprescindible que el paciente no se mueva y que contenga la respiración cuando sea necesario con el fin de obtener un buen resultado.

Contraindicaciones

Si piensa que está embarazada o sufre un retraso de la menstruación, indíqueselo al técnico que lo atienda. La radiografía está contraindicada en mujeres embarazadas, especialmente durante el primer trimestre del embarazo, aunque puede practicarse en ciertas situaciones excepcionales.

Radiología digital

  • Radiología estándar digital
  • Artrografía
  • Infiltración mediante control radioscópico
  • Exámenes digestivos, urológicos y ginecológicos